Las Cosas No Cambian de Alberto Gambino

“Las Cosas No Cambian” es una canción de Alberto Gambino, un destacado artista dentro del panorama del hip hop y rap en español. Esta pieza forma parte de su álbum del mismo nombre, lanzado en 2016. Las letras reflejan una perspectiva cruda y auténtica sobre la vida contemporánea, abordando temas de frustración y autoconocimiento entrelazados con toques de humor e ironía.

La letra presenta un marcado tono resignado ante la repetición constante de ciertas situaciones en la vida. Con afirmaciones como “las cosas no cambian”, Gambino se sumerge en un estado reflexivo donde reconoce que a pesar de sus esfuerzos o deseos, los patrones tienden a permanecer estancados. Este “mismo rollo” puede interpretarse como una crítica hacia la monotonía que muchos pueden sentir en su día a día, sugiriendo que las luchas internas son universales y atemporales.

Hay momentos en la letra que revelan una lucha personal con el mundo exterior. La línea "Estoy fumado para variar" puede sugerir un intento de escapar de la rutina y las presiones externas, utilizando sustancias como medio para encontrar algo más profundo o simplemente para lidiar con el tedio. Además, Gambino alude a su proceso creativo cuando menciona “con parto canciones con estivi”, enfatizando cómo sus pensamientos lo conducen a crear música incluso en medio del caos emocional.

A lo largo del tema también se hace evidente un sentido de autoconsciencia muy fuerte; él sabe que hay mucho por contar y desafía los convencionalismos del rap actual al alegar que hay quienes consideran tener menos “flow” por el simple hecho de sus elecciones estilísticas. Esto introduce una crítica explícita al mercado musical actual y a los estándares impuestos sobre lo que se considera hip hop genuino.

Otro aspecto interesante es la vuelta hacia lo simple:"Yo quiero ser feliz, yo no quiero ser rico". Aquí Gambino revela un anhelo por una vida sin las complicaciones materiales impuestas por la sociedad moderna. En este sentido, se percibe un conflicto interno: mientras busca autenticidad y felicidad interna, está atrapado por la presión social del éxito económico.

En términos curiosos sobre esta canción, podemos notar cómo fue recibida tanto por fanáticos como críticos. Su estilo directo y sin filtros ha resonado dentro de una generación joven que busca sinceridad en las letras musicales frente a los discursos más superficiales comunes en otras corrientes pop. El uso recurrente de frases cortas y repetitivas genera un ritmo casi mantraico que puede ser tanto relajante como provocador, permitiendo al oyente introspeccionar durante su escucha.

La producción musical acompaña perfectamente esta esencia cruda; instrumentación sencilla con ritmos marcados logra enfatizar aún más el mensaje central. Todo esto muestra cómo Alberto Gambino no solo está narrando su historia personal sino también conectándose con experiencias compartidas por muchos otros.

Dentro del contexto cultural español contemporáneo, “Las Cosas No Cambian” emerge como una oda a las realidades inquebrantables de nuestras existencias ya sea desde el escenario urbano hasta el estudio o incluso nuestra propia mente. Expresa esa necesidad universal: entendernos mejor a nosotros mismos mientras navegamos por continentes emocionales plagados de ruido constante pero irrelevante. Es decir: aunque tengamos claros nuestros sueños e ideales, siempre habrá obstáculos —y eso nunca cambiará— pero lo importante es seguir adelante sin perder nuestra esencia creativa ni nuestra libertad personal.